La lectura y su poder sanador
Desde la Asociación Vida dedicamos estas palabras como prólogo para al enlace de su libro.
"Casi no hay sitio por donde avanzar"..."el mundo se ha parado"... escribe la autora en las profundas letras de su libro.
En mitad de esa nada que nos rompe el todo, con un dolor indescifrablemente íntimo, ella compuso un libro entero para llorar a cada muerto, para levantar la esperanza de la vida y abrir fronteras aún desnudas.
Los destinos se van cruzando y crean eslabones: Un amigo que tenía ese libro dedicado por la escritora, quiso dejarlo en mis manos por un tiempo. Yo conocí primero su historia, la de María Jesús, su narración, su humanidad, sus llantos como flores, su renacer y un final feliz. Luego la conocí a ella en persona; la autora hoy es amiga. Y es que cuando no hay sitio para avanzar, la vida te trae otros regalos del alma. El mundo se para y se reinicia a unos ritmos misteriosos. Hoy, Susi, como las llamamos sus amigos, pertenece a la Asociación Vida, que también nació del dolor. De ese mismo dolor de perder y perderte en el mundo que se ha ido.
En este día del libro, de este tan estrangulado 2020, María Jesús de León pone su obra en abierto. Para el mundo, lo regala de nuevo y en el blog de VIDA, le reservamos todo su sitio, para que sepa que estamos orgullosas de tenerla con nosotras, como hermana.
Susi ha creado en su caminar muchas bolsas de comprensión para afrontar el duelo. Manos que acompañan corazones rotos. Esas manos recicladas como bolsas, que envuelven, acogen, acarician y no preguntan.
Su libro nos transporta de la desventura a la reconstrucción de uno mismo. Nos riega con nuevos conceptos traídos de ésta y otras culturas. Nos habla de la calma, la paciencia, de la espera, de montañas que se pierden y árboles que no crecerán. Hay flores que ella siembra, la del perdón, la voluntad y la fortaleza. Son un jardín que se sale del libro para apelarnos a todos.
No se puede resumir el libro porque no se resume la humanidad que destila cada pérdida, ni cada encuentro. Solo cabe resumir la valentía, la honestidad en este viaje hacia uno mismo que ella descifra para el resto. Con una sinceridad inapelable. Puede que no haya caminos sin finales líquidos. Pero si las lágrimas son ahora el único espejo que devuelve tu imagen, no viajes sola. Coge la mano de una Amazona en la Centella, lee en las estrellas y llena tu bolsa. Estamos para contarlo.
Susi, déjanos contarte que para nuestra Asociación Vida más que semilla, eres la savia de un tronco común. Con tu libro y con tu presencia, tus palabras nos florecen esperanzas.
El libro hay que leerlo y a su autora hay que abrazarla. Su generosidad, nos traspasa.
Gracias autora, amiga, hermana.
Gracias en abierto.
http://papageno.es/amazona-centella-afrontar-duelo
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